Los concejales de Turismo, Alicia Crespo, y Salud y Consumo, David Martín, han explicado que no se hicieron con tiempo los trámites para disponer de este espacio y han afirmado que desde el nuevo equipo de Gobierno “se piensa en los amantes de los animales” y, por eso, de mano de los técnicos, ya se han puesto en marcha, junto con la delegación de Salud y Medio Ambiente de la Junta, para preparar la documentación necesaria y cumplir todos los trámites para recuperar el espacio para mascotas el próximo año

Los ediles de Turismo, Alicia Crespo, y Salud y Consumo, David Martín, han anunciado que Motril no dispondrá este verano de un espacio de playa apto para mascotas tras comprobar que las gestiones realizadas por el anterior equipo de Gobierno han sido insuficientes.

Alicia Crespo ha explicado que ante las múltiples consultas de personas de diferentes comunidades autónomas interesándose por la existencia de una playa para perros en Motril, desde el Ayuntamiento se han visto obligados a comunicar que este verano no se podrá prestar este servicio porque existe una normativa (el RD 194/1998 de 13 de octubre por el que se aprueba el Reglamento sobre vigilancia higiénico sanitaria de las aguas y zonas de baño de carácter marítimo) que prohíbe el acceso de animales domésticos a las aguas y zonas de baño durante la temporada de baño, en el periodo comprendido entre el 1 de junio y el 30 de septiembre de cada año.

Crespo y Martín han indicado que el nuevo equipo de Gobierno, en la línea de transparencia establecida tras su toma de posesión, no está dispuesto a cometer ninguna transgresión de la normativa, así que se ha visto obligado a tener que cerrar la playa a las mascotas.

La edil de Turismo ha argumentado que el verano pasado sí se disfrutó de este tipo de playa porque el equipo de Gobierno anterior se limitó a modificar una ordenanza municipal, “pero olvidó que el trámite para conseguir este tipo de espacios es mucho más amplio y compete, además a las administraciones autonómica, central y europea”. 

“Por tanto, y como se comprenderá, este año es imposible poner en funcionamiento dicho servicio porque, lo primero que hay que hacer es contemplar la posibilidad de desclasificar una zona de nuestras playas del catálogo nacional de playas aptas para el baño, acotarla, acondicionarla y darle uso para animales domésticos. Esta gestión la solicitan lo municipios aproximadamente en febrero y esto no lo hizo el anterior equipo de Gobierno. Además, hay que elevar esta documentación a la Junta, Costas y la Unión Europea para que lo autoricen. Como esta gestión no se realizó, no tendremos dicho servicio”. 

Para poder disponer de una playa para perros es necesario disponer, a principios de año, de la baja de la zona que se destine para el uso de mascotas del censo de zonas de aguas aptas para el baño, por lo que este lugar ya no entraría dentro de los controles analíticos que de forma regular se realizan en todas las playas. A partir de ahí, se acotaría el espacio, se adaptaría y se colocarían los carteles indicativos.

Por su parte, el edil de Salud y Consumo, David Martín ha afirmado que desde el equipo de Gobierno “se piensa en los amantes de los animales” y por eso, de mano de los técnicos, ya se han puesto en marcha junto con la delegación de Salud y Medio Ambiente para preparar la documentación necesaria y cumplir todos los trámites para recuperar este espacio para mascotas. 

“Ponemos la maquinaria en marcha para hacer lo necesario para que el año que viene, en la misma zona que se había pensado, delimitar una zona para perros con todos los elementos necesarios para ello y, sobre todo, descatalogarla del puesto de muestreo”, ha indicado Martín, quien ha incidido en que esta no es una tarea “de hoy para mañana” pero que seguro que en  antes del mes de febrero el equipo de Gobierno vas a tener todo preparado “para que Motril sea pionera en las playas de perros pero siempre respetando la legislación vigente”.

Finalmente, la técnico de la concejalía de Salud y Consumo, Teresa Vallejo, ha insistido en que para poder disponer de una playa para perros es necesario solicitarlo a principios de año con una memoria valorada y remitida a varias instituciones, así como adaptarse a las normas de higiene pertinentes y, una vez aceptada, destinar una partida presupuestaria para adaptar la zona a dicho uso.  “Queremos hacer la cosas dentro de la legalidad”, ha concluido.